EN TUS MONTES DE TOLEDO, de Manoli Asenjo

Fíjate si serás grande, Javi, que cuando supe que te habías ido, sentí un mazazo;  era de noche, no podía dormir.  Y mira si lo habrás hecho bien, que por encima de mi angustia,  de esa tristeza infinita, solo me consolé al meterme a pastar  tus letras. En tus Montes de Toledo. Y la angustia se hizo paz.

Gracias Javi (que no Francisco, como insistías cuando eras nuevo) Javi Jiménez, como cuando charlábamos de Borges, y de Ciudad Seva, antes que te pusieras el Ximens, que a mí no me gustaba, y a tí te sonaba" chulo". 
Por esa herencia de tus cuentos, por esos recuerdos tan divertidos. Gracias
(Manuela Asenjo)

Comentarios

Entradas populares de este blog

TU ORIGINALIDAD, de Mariano Zurdo

HASTA LUEGO, de Mei Morán